Bloguera de pacotilla

Muy a mi pesar debo admitir que soy una bloguera de pacotilla, así es, a la mínima que la actividad en otras áreas de Slowers se incrementa mi dedicación al blog disminuye drásticamente. Y como siempre os digo, es cierto que es una de las cosas que más me gusta, pero también es cierto que me gusta escribir con calma, pensar tranquilamente lo que voy a contar y cuando no dispongo de ese tiempo no llega la inspiración.

El motivo principal de este abandono ya os lo expliqué en otro post y se debe a la decisión de empezar a asistir a ferias, hecho que implica una serie de acciones nuevas para mí como preparar un muestrario, un catálogo, un kit de prensa … y otras minucias que han requerido toda mi atención, aparte claro está, de la propia asistencia a la feria y los 5 días que pasé en Berlin (maravillosa ciudad, por cierto).

 

La cuestión es que en un tiempo récord preparé los nuevos diseños de alpargatas, se hicieron los prototipos, diseñé los estampados, busqué los tejidos, se estamparon y conseguimos (gracias al esfuerzo inestimable de la gente del taller) acabar a tiempo, eso sí, de fotos y catálogo nada de nada. El muestrario llegó a casa el sábado a las nueve de la noche, el domingo acabé de poner cordones y preparé maletas, el lunes a las 8:00 salía de Morella y a las 20:00 acababa de montar el stand en Berlin. Primera prueba superada!

Respecto a la feria, el lugar fantástico y la gente genial, supongo que el hecho de que sea una feria basada en el respeto y la ética hace que todos lo expositores tuviéramos mucho en común y el ambiente era bueno, muy de cooperar, de compartir, y eso se agradece. Como contrapunto puedo decir que se trata de una feria muy tranquila, ya que atrae a un tipo de comprador muy concreto, y esa baja afluencia de gente en algunos momentos del primer día llegó a desesperarnos.

 

Sin embargo, poco a poco se fueron concretando contactos interesantes y la sensación final fue de satisfacción, pues aparte de las ventas que surjan de esos días, el contacto directo con las tiendas me sirvió para confirmar que las Slowers gustan (ay que alegría!!!) y pude definir mejor la estrategia a seguir a partir de ahora.

 

Aquí os dejo con algunas fotos que certifican mi paso por Belin.