En estos días está asomando la nariz un mundo que muchos no nos habíamos atrevido ni a soñar. Vemos como por primera vez en años los canales de Venecia transportan agua clara ¡y peces!, en Shanghai han visto el cielo azul, las emisiones de dióxido de carbono están por debajo de la mitad, el aire transporta olor a primavera incluso en las grandes ciudades, el silencio nos permite escuchar a los pájaros y las abejas se están reproduciendo más que nunca.
Y eso nos gusta. Nos encanta. Supongo que a ti también.
Cuando todo esto pase…
Todos vamos a recordar que hemos sentido más fuerte que nunca el latir de la naturaleza. En nosotros quedará el deseo de volver a respirar y ver un planeta más sano. Ya hemos vivido la experiencia de sentirnos parte de la Tierra y no dueños de ella.
Muchos vamos a preguntarnos cómo hacer las cosas de forma distinta y más respetuosa.
Queremos que esto siga ocurriendo…
Para ello será necesario inventar una nueva forma de estar en el mundo, vamos a necesitar mucha creatividad, nuevas formas de hacer las cosas, nuevas maneras de crear empresas, nuevas formas de energía, nuevas formas de consumir y nuevos valores.
Tenemos a nuestro favor …
- Las energías limpias y renovables están en un punto de desarrollo que nos permitiría reducir el uso del petróleo muchísimo.
- Tenemos modelos de empresas sostenibles en muchos sectores, muchas pequeñas, como Slowers, nacieron ya con vocación de sostenibilidad. No ha sido un camino fácil encontrar materias primas orgánicas y de proximidad, fabricar y vender en el mismo país, eliminar el uso de plástico y respetar a personas y animales. Ser pioneros no es el camino más sencillo pero para nosotros ha sido el único. Ahora tenemos todo ese conocimiento.
- Tenemos un tejido empresarial y de suministros sostenibles que ni soñábamos en 2012 cuando empezamos.
- Tenemos personas conscientes, emprendedoras y con ideas para seguir construyendo el mundo que quieren.
- Y tenemos consumidores conscientes que apoyan la labor de personas y empresas que abren camino y trabajan desde el respeto al planeta y los seres que lo habitan.
Cada pequeña decisión tiene un gran poder, cada gesto, cada persona puede hacer crecer un poquito ese mundo que queremos.
El microscópico COVID-19 ha sido capaz de cambiar nuestro mundo. ¿Qué podríamos lograr los humanos si estuviéramos unidos?
Esta pausa puede ser un punto de inflexión para la consciencia humana, no la dejemos pasar.
Y a ti, ¿cómo te gustaría ser parte de este cambio? ¿Nos encantaría leer tus ideas y propósitos en comentarios!
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