LAS 4 ESTACIONES DE SLOWERS

Ayer me dio por pensar que este blog ya ha pasado por las cuatro estaciones, y de alguna forma las he ido nombrando, y os he ido explicando lo que más me gusta de cada una de ellas. De hecho hace un año estaba yo dándole vueltas a la cabeza pensando de qué hablaría… qué cosas! Así que he decidido rescatar una foto representativa de cada una de ellas y en ese instante me he dado cuenta de la dificultad de dicha tarea.

 

Desde luego, entre muchas otras satisfacciones, este blog ha hecho que despertara en mí cierta curiosidad por la fotografía y por intentar plasmar en imágenes esos instantes de gran belleza de los que disfruto cada mañana. Así que en estos momentos dispongo de un archivo fotográfico considerable, cuyos principales protagonistas son los fósiles, plantas, hojas, piedras, nubes, árboles, vacas … fotografiados a lo largo de unos 330 días de paseos matutinos.

 

 

Empezamos por el otoño, en septiembre se puso en marcha el blog y destaqué en uno de los primeros posts que esta era mi época favorita para pasear. Lo confirmo, temperatura agradable, bellos colores marrones y ocres, y la posibilidad de ver amanecer a unas horas decentes. Me quedo con esta foto.

 

 

 

En invierno hemos paseado (hablo en plural porque mi compañero inseparable en estos paseos es Ringo, abajo pongo una foto suya, no podía faltar aquí!) bajo la lluvia, con nieve, frío, pero sobre todo con viento, mucho viento, tanto que a pesar de ser uno de los fenómenos meteorológicos que menos me gustan empecé a encontrarle su punto. Esta foto muestra los colores más frecuentes en los amaneceres de esta época del año, colores tan fríos como las temperaturas.

 

 

Y la primavera, que este año ha pasado desapercibida entre tanta lluvia y bajas temperaturas, pero cuanta belleza! Flores por todas partes, el monte multicolor y tal cantidad de fotos fantásticas que me resultaba imposible quedarme solo con una. Finalmente he optado por esta tan sencilla porque hay flores, porque es característica de esta zona con sus muros de piedra en seco y por ese cielo azul intenso típico de esta estación.

 

 

Y sin duda estos son los colores del verano en mi tierra y este el aspecto de los campos. Y ahí estoy yo saltando cual grácil gacela y celebrando el verano, el calor, los días largos …en definitiva, viviendo la vida slow!!!