Post
Mi preciosa elefanta.
Hace un tiempo tuve ocasión de asistir a un taller que organizó Duduá en su antigua tienda de Barcelona, donde Eva, de Misako Mimoko, nos enseño a hacer animalitos con guantes. Para mí Eva es una de esas personas que tiene un estilo 100% genuino y así son todos los muñecos y objetos que crea. En el taller nos dio un manual con diferentes animales y yo me decidí por el más surrealista: la elefantita.
UN EMPACHO DE CONSUMO
Hace unos meses cayó en nuestras manos una revista de la que ahora en casa somos fans absolutos. Estoy hablando de Yorokobu, cuyo blog recomiendo también a todos los que aún no lo conozcan. Su lema es “Take a walk on the slow side”, ahora entendéis más por qué me gusta, ¿no? Bueno, la cuestión es que en ese número había un artículo del cual se me quedó grabada una frase que decía aproximadamente así:
“Viajamos a la estación de consumo pero Felicity no estaba esperando”.
Creo que esta simple frase resume uno de los grandes problemas que tiene hoy en día nuestra sociedad, la fiebre de consumo. Nos han hecho creer que si no tenemos un supercoche no podemos ser felices, si tu look no encaja con el escaparate de Zara…buf, estás acabado, si el último iphone aún no está en nuestro bolsillo…no estamos a la moda, etc, etc.
Bellos detalles de otoño de mis paseos matutinos.
Mis paseos matutinos: un lujo 100% slow
Todos los días mi primera tarea de la mañana consiste en dar un paseo con Ringo; en realidad lo de Ringo es una excusa porque a estas alturas ya no se quien disfruta más de esos momentos, si él o yo. Busco caminos de tierra solitarios, cerca de casa, sin reloj, sin móvil, sin hora fija para volver … un verdadero lujo slow. Ringo hace sus cositas, corre, huele todo lo que se pone a su alcance, ladra a las vacas y ovejas y persigue cabras montesas. Yo camino, observo, escucho, huelo, … y entre lo uno y lo otro, y en función de la estación en la que estemos, cojo flores, encuentro algún fósil, como moras, hago fotos, o simplemente disfruto de pasear.
Ringo: el rey de la casa
Hoy quiero presentaros a Ringo porque presiento que va a tener un papel protagonista en este blog. El verano pasado decidimos introducir un perro en nuestras vidas, y después de un cuidado proceso de selección llegó a casa Ringo, nuestro querido Schnauzer miniatura. Queríamos un perro de tamaño reducido con dos requisitos de gran importancia: que no soltara pelo y tampoco babas …y dimos con él.