En el post de hoy voy a hablar de zapatos veganos y ecológicos, porque resulta que no todos los zapatos cruelty-free son sostenibles (en realidad sólo una minoría lo son) y esto depende de los materiales con los que están hechos. Este es un tema que a veces trae confusión y que vamos a aclarar en este post viendo uno a uno los diferentes materiales utilizados para fabricar calzado vegano.
ÍNDICE:
- Materiales veganos y ecológicos
- Materiales veganos NO ecológicos
- Materiales veganos y ecológicos para suelas
- Piel vegano, cuero vegano, piel vegetariana, piel vegetal … ¿son veganos?¿son ecológicos?
- Otro factor a tener en cuenta
Sabemos que calzado vegano es aquel que está fabricado con materiales libres de sufrimiento animal, es decir, que no contiene ningún material de origen animal en ninguna de sus partes (corte, suela, plantillas, plataformas, …). Así que para empezar y hacer un primer descarte de materiales (que ya conocerás si estás introducido en el veganismo), te comento los materiales que NO deberían utilizar las marcas que fabrican calzado vegano:
- Piel de animales mamíferos: cuero, nobuk, serraje, etc…
- Piel de pescado o reptiles.
- Lana.
- Seda
- Plumas naturales.
- Colas para pegar las suelas con base animal.
Y entonces,
¿Qué materiales se pueden usar para hacer unos zapatos veganos? Y más importante ¿Son estos materiales sostenibles y ecológicos? Allá vamos.
Hoy en día la tecnología ha hecho que existan muchas opciones y cada día encontramos más alternativas que no solo contemplan la sustitución de la piel animal sino también la protección del medio ambiente y la sostenibilidad. Este es el camino que seguimos en Slowers y por eso estamos al día de todos los nuevos materiales que salen al mercado porque queremos que nuestros zapatos sean respetuosos con los animales, con el planeta y con todas las personas que trabajan en el proceso.
Te explico un poco cuáles son las principales alternativas:
Materiales veganos y ecológicos para zapatos
– Nuevos materiales desarrollados a partir de fibras vegetales
Este es un sector en el que se está investigando mucho actualmente y están saliendo cada vez más tejidos alternativos a la piel. Por ejemplo el Piñatex es un tejido hecho en base a fibras de piña apto para fabricar calzado, también las fibras de maíz y hongos se están desarrollando para que puedan tener este uso. Este es un sector en alza que estoy segura que traerá grandes opciones veganas y sostenibles a unos precios moderados en pocos años.
– Tejidos vegetales tradicionales: lino, yute, rafia, corcho, …
Por otra parte, los tejidos como el lino, el yute, la rafia o el corcho son tejidos que se han usado desde hace muchos años para el calzado de verano y que para mí son la mejor opción si quieres unos zapatos frescos y naturales.
Tejidos naturales cuyos cultivos no tienen grandes exigencias de agua ni suponen un grave impacto para el medio ambiente, aunque si cuentan con certificado orgánico mucho mejor.
Esta es una muy buena opción de zapatos veganos y ecológicos, especialmente para el verano.
– Algodón orgánico.
El algodón es un cultivo vegetal que podría estar en el apartado anterior pero en mi opinión merece un apartado propio por ser uno de los textiles más utilizados en verano y porque su cultivo, si no es orgánico, crea un impacto muy grave en el medio ambiente, especialmente por las grandes cantidades de agua que requiere tanto en su cultivo como en el procesado posterior. Si quieres saber más sobre la diferencia entre algodón orgánico y algodón convencional en este post te la explico más ampliamente.
En Slowers siempre hemos optado por trabajar principalmente con fibras vegetales como el algodón orgánico , el lino, corcho y yute, aunque últimamente estamos introduciendo otro tipo de tejidos de bajo impacto ambiental que te comento en el siguiente apartado.
En el marcador vegano y sostenible todos estos materiales tendrían puntuación máxima.
– Tejidos reciclados.
Esta es una alternativa muy interesante ya que cada vez estamos generando más residuos y por tanto la reutilización de estos materiales muchas veces (dependiendo de la energía y agua consumidas en este proceso) es mejor que la fabricación de un material nuevo, especialmente si se trata de materiales de origen plástico.
En este caso hay tejidos que se hacen a partir de botellas de plástico PET, tejidos hechos con poliéster reciclado o tejidos fabricados con algodón regenerado (algodón que ya fue usado y las prendas se han desechado, se trituran, se vuelve a hilar y se hace un nuevo tejido). En la última colección de Slowers hemos incluido algún modelo con este tipo de tejido y estamos muy contentos con el resultado.
A estos materiales también les daríamos una puntuación alta tanto en veganismo como en sostenibilidad. Y en mi opinión este es el camino del futuro, el de dar una segunda oportunidad a los materiales ya utilizados y trabajar en conseguir procesos de reciclado eficientes energéticamente.
Materiales veganos NO ecológicos para zapatos
– PU, PVC, polipieles, …
Esta es la alternativa más habitual de la piel animal, gran parte de los zapatos veganos se fabrican con estos materiales. Son de origen sintético (vamos, que son plásticos con distintos tratamientos) y por lo tanto puntúan muy bajo en la escala del respeto al medio ambiente y la sostenibilidad (supongo que ya conoces el impacto de los plásticos en los océanos). Por otra parte son materiales que no transpiran bien y por lo tanto, aunque se usen mucho, yo no los considero idóneos para fabricar calzado, especialmente si estamos buscando confort y comodidad.
Sin embargo, también es cierto que están saliendo alternativas con un porcentaje de reciclado que pueden ser buenas opciones para las suelas. En Slowers tenemos tenemos un modelo con suela de PU eco que tiene hasta un 70% de reciclado.
– Microfibras
Estos tejidos se fabrican con fibras sintéticas textiles muy prensadas de forma que consigue un efecto final bastante similar a la piel animal en cuanto a aspecto y resistencia. La gran ventaja respecto a las anteriores es que son transpirables, lavables y muy resistentes.
Ambientalmente no son ideales, sin embargo ya encontramos microfibras con un porcentaje reciclado y hay que decir que su proceso de fabricación es bastante limpio y eficiente, especialmente si lo comparamos con el proceso de curtición de la piel animal, que es muy contaminante y consume grandes cantidades de agua. Y esto también cuenta en el balance global del material.
Esto hace que se puedan plantear como una alternativa razonable para el calzado vegano, especialmente para invierno, donde todos los tejidos vegetales se quedan un poco cortos en cuanto a confort y calor.
Para resumir he creado este esquema, que evidentemente se basa en mi opinión y experiencia, y que clasifica a los principales materiales veganos en función de su grado de respeto por el medio ambiente:
Materiales veganos y sostenibles para suelas de calzado.
Hasta ahora he hablado más de la parte que corresponde al corte exterior, al forro o a las plantillas. Pero en el calzado la suela es un punto determinante y aunque pensando estrictamente en veganismo no tiene especial relevancia puesto que lo más habitual es que estén fabricadas con gomas y cauchos, sí es una tema fundamental si queremos una suela ecológica y sostenible.
Personalmente, creo que este es el punto al que le he dado más vueltas con Slowers, y casi me volví loca buscando alternativas que me convencieran. Empecé diseñando alpargatas de esparto o esparteñas, y ahí era sencillo, la suela es de esparto o yute y no puede ser más ecológica. Pero cuando quise ampliar me encontré con un mundo muy poco eco. En estos momentos pienso que posiblemente el caucho natural y el neumático reciclado son las mejores alternativas y estoy convencida de que en breve tendremos muy buenas opciones en base a reciclados que amplíen esta selección.
Y para acabar con los materiales, una última cuestión que a veces genera dudas:
Piel vegana, cuero vegano, piel vegetariana, cuero vegetal … ¿Son veganos? ¿Son ecológicos?
Muchas veces existe confusión entre estos términos ya que son conceptos bastante nuevos que se van introduciendo sin estar 100% estandarizados. De forma rápida y simple te diré que si llevan la coletilla “vegano” es que no son de origen animal (aunque la palabra piel te lleva a pensar en ello).
Sin embargo se suelen utilizar los términos piel vegetariana y cuero vegetal para definir la piel animal que ha sido curtida con taninos vegetales y por lo tanto es libre de sustancias tóxicas como el cromo. Esta última es menos contaminante que la piel de curtido tradicional y por lo tanto más eco-friendly, pero no es vegana, su origen es animal. Algunas marcas de calzado no veganas pero que se interesan por la cuestión ambiental usan este tipo de piel que genera menor impacto ambiental.
Otro factor a tener en cuenta para que tu calzado sea vegano y ecológico
Hemos hablado de los materiales, pero si estamos valorando lo ecológicos y sostenibles que son unos zapatos veganos deberíamos también tener en cuenta otro factor fundamental que es dónde y quién ha hecho mis zapatos . Y ¿por qué tener en cuenta esto? Por tres cosas básicamente:
- Porque a más kilómetros más contaminación. Los transportes contaminan mucho y por lo tanto lo más ecológico es utilizar zapatos km0, fabricados en tu propio país o lo más cerca posible. Además en España somos buenos fabricando calzado (en el resto del mundo valoran muchísimo el calzado hecho aquí) y esto te asegura un extra de calidad, que tampoco es una tontería (cuanto más duraderos más sostenibles son unos zapatos).
- Porque en España y Europa se exigen unos estándares medioambientales que en otros países no existen, así de claro. De ahí las nubes de contaminación que cubren los cielos de algunas zonas en China.
- Y finalmente, porque cuando hablamos de sostenibilidad también hablamos de las personas que participan en todo el proceso de fabricación del zapato. Si queremos que en el proceso de fabricación de nuestros zapatos no exista explotación animal o de personas es importante saber dónde y cómo están hechos nuestros zapatos.
¡Y con esto acabo! Estos son los puntos que yo considero que hay que tener en cuenta para valorar si unos zapatos son veganos, ecológicos y sostenibles. O al menos son los que yo siempre tengo en cuenta como diseñadora y como parte de esta rueda de consumo.
Antes de crear Slowers me dedicaba a redactar estudios de impacto y restauración ambiental, así que esta parte de conciencia ambiental ya existía en mí antes de empezar a diseñar zapatos. El veganismo se incorporó más tarde y fue el complemento perfecto, ya que estoy convencida de que este es el camino hacia un planeta con más equilibrio y respeto.
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